viernes, 14 de agosto de 2009

Editorial

Agosto en Sevilla es una maravilla.

Un año más, y ya van enecientos, el campamento pasó por la centrifugadora lúdica de Isla Mágica, ubicada en la capital del rio Betis. Hubo de todo: remojones (por dentro y por fuera), mareos del Marín en el Jaguar, colas hasta en los servicios, cierre por unas horas del Fuerte (con lo que esto conllevó), hinchazón de tobillos, olvido de bocadillos en el autobús, colada de monitores como niños de secundaria... En definitiva, fue un día maravilloso que todos guardamos en nuestro corazón.



Dentro de la brevedad habitual de nuestras editoriales, no queremos dejar de hacer mención especial a una circunstancia especial. Este año en Isla Mágica, al contrario que en anteriores ediciones, hacía un fresquito glacial, y hasta los piratas iban con forro polar. Tan extrema era la temperatura ambiente soportada que la dirección de Isla Mágica instalo estufas gigantes repartidas por todo el recinto, tal como podemos apreciar en la imagen.



Nos tiramos toda la tarde de la estufa al bar (donde pedíamos un tazón de chocolate hirviendo), y del bar a la estufa. Incluso al operario que va embutido en el disfraz de gomaespuma representando a la mascota tuvieron que ponerle una bufandita y orejeras.

A eso de las ocho de la tarde tuvimos la suerte de presenciar una función de equilibristas y malabaristas orientales que, con gran destreza, lograron alzar de sus asientos a todos los que nos encontrábamos en el fuerte disfrutando del evento. Esta experiencia nos hizo meditar y llegamos a la conclusión de trasladar la esencia del antiguo oriente al campamento. Pero esto lo explicaremos más detalladamente en otros artículos.


Conclusión: El año que viene al Aquasherry.

1 comentario:

Alfonso Donoso Barella dijo...

Pues la verdad es que no tenía mucha envidia del día este, pero viendo las fotos, leyendo las crónicas y pensando en lo que podría haber liado yo con mi presencia... pues nada que hablando con Mª Esperanza parece que llegamos a un común acuerdo: El año que viene nos apuntamos a Isla Mágica.

"Ya va quedando menos para el próximo campamento".

Saludos.